Después
de tanto tiempo te habrás dado cuenta de que me cuesta muy poco llorar,
y cuando esté triste a veces te dolerá estar conmigo. Me rio muy a
menudo, y tengo la risa tan pegadiza que cuando la oigas querrás reir
también. Soy incapaz de estarme quieta, hablo demasiado y me enfado muy
deprisa aunque se me pasa rápido. Escribo frases en los márgenes de los
libros. Lo que puedo prometerte es que no te aburrirás conmigo, te
volveré loco y querrás salir corriendo de lo pesada que me pongo a
veces. Pero oír tu voz susurrando en mi oído, tu sonrisa cuando más la
necesito, cuando tu mirada se encuentra con la mía, cuando apoyo mi
cabeza en tu pecho y siento tu respiración, que me digas te quiero sin
venir a cuento, que me hagas reír por cualquier gilipollez, poder
abrazarte cuando todo va mal, un mensaje a las tres de la madrugada,
ponerme nerviosa cuando me dices: ''Oye, tengo que decirte algo...'',
sentir ese cosquilleo que te sube por el cuerpo cuando te veo, besarte y
desear que por nada del mundo termine ese beso... Todas esas cosas me
pasan contigo. ¿ Y qué? Soy la persona más feliz del mundo. Y lo soy
gracias a ti. Gracias a cada momento que he pasado contigo. Vivo de tus
recuerdos y de los momentos que me das. Vivo de ti. Vivo de tu sonrisa.
Vivo de respirar tu mismo aire. Vivo de alimentarme con tus besos. Vivo
de beber tu saliva. Vivo de los latidos de tu corazón.
Digan lo que digan los demás, y pese a todos los pronósticos, tú y yo
seguimos siendo especiales. Seguimos siendo nosotros. Especiales.
Únicos. Sigues dándome los mejores momentos de mi vida. Esos momentos
que no cambiaría por nada. Esos momentos que sólo me das tú. De lo que
te hablo son de los momentos que valen la pena, de los pequeños detalles
de la vida. De ti, de mis sensaciones.
Tú eres de esos que dicen “Quiero” y lo consigue, de esos que creen que
la felicidad no se busca, llega un día así, llama a tu puerta. Eres de
las personas que muestran todo de si mismo cuando creen que
verdaderamente merece la pena.
Tú eres el que dice Alba, tú quieres, y yo consigo las cosas. Eres el
que llegó y llenó mi vida de felicidad. Eres la persona que me ha dado
todo y ha sacado todo de mi. Tú, que me devolviste el rosado de mis
mejillas, la sonrisa incontenible y haces que mi corazón enloquezca cada
vez que veo esos ojos que me miran. Y yo me pregunto, ¿En qué piensas?
¿Qué está pasando ahora por tu mente? ¿Suspiras cada vez que te miro?
¿Te mueres cada vez que me he ido?
Yo, que me pierdo cada vez que sonríes. Yo, que tengo la imperiosa,
irresistible, increíble, inhumana, inexplicable necesidad de abrazarte,
siento que desde hace mucho tiempo te estaba esperando. No te vallas..
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